Es urgente desbloquear la Negociación Colectiva pendiente para reactivar la economía y el empleo

11 Oct Es urgente desbloquear la Negociación Colectiva pendiente para reactivar la economía y el empleo

La tasa interanual del Índice de Precios de Consumo general en el mes de septiembre es en Castilla y León del 3,4%, dos décimas más que la registrada en agosto, y tres décimas por encima de la media nacional (3,1%)

Entre los grupos que han tenido mayor influencia en este aumento en Castilla y León destacan el de Bebidas alcohólicas y tabaco, cuya tasa se ha incremento 3,7 puntos hasta colocarse en el 9,4%, variación que se explica por el aumento de los precios del tabaco. El Transporte ha aumentado 6 décimas debido a que los precios de los carburantes y lubricantes han subido más en septiembre de 2011 que el pasado año.

La tasa anual de la inflación subyacente, que mide la variación general de precios descontando los alimentos no elaborados y los productos energéticos, ha sido del 1,7%, una décima por encima de la registrada el mes anterior.

De este incremento de los precios se deriva también el que se registren caídas en los niveles de consumo e inversión, lo que provoca la consiguiente caída de la demanda interna, motor de nuestra economía.

Por ello, es fundamental que se realice una política salarial que consiga no sólo el mantenimiento del poder adquisitivo de los salarios, sino una mejora moderada de los mismos, de no ser así la actividad económica continuará estancada, suponiendo ello un obstáculo infranqueable para la recuperación del empleo.

Por lo tanto, es urgente que la Negociación Colectiva recupere su papel en cuanto a protección y mantenimiento del empleo así como instrumento de redistribución de la renta y que los empresarios de Castilla y León asuman su responsabilidad con respecto a los trabajadores que se encuentran a la espera de renovar su convenio colectivo.

UGT CyL advierte a todos aquellos que pretenden llevar a cabo una devaluación salarial camuflada vinculando salarios a productividad, que esto supondría un recorte salarial con el consiguiente retroceso en la calidad de vida de los trabajadores, más desigualdad social y mayor precariedad laboral.

 

 

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