Los pensionistas y jubilados de UGT y CCOO alertan del riesgo de empobrecimiento de su colectivo y llaman a la movilización

04 Oct Los pensionistas y jubilados de UGT y CCOO alertan del riesgo de empobrecimiento de su colectivo y llaman a la movilización

El 40,57% de los pensionistas de Castilla y León están por debajo del umbral de la pobreza, es decir, viven con menos de 525 euros al mes, en el caso de un hogar integrado por un adulto y de 787 euros al mes, si ampliamos a dos personas la unidad familiar. Una situación que según ha denunciado hoy el recientemente reelegido Secretario Regional de la Unión de Jubilados y Pensionistas de UGT, Anatolio Díez, se está agravando debido a los recortes del Gobierno, especialmente graves en la sanidad por sus repercusiones negativas en la salud y el bienestar de las personas mayores. En este sentido, tiene especial impacto la extensión del copago farmaceútico al colectivo de pensionistas  y más recientemente, la inclusión del copago hospitalario que entrará en vigor en octubre y que afecta con mayor incidencia a personas dependientes, enfermos crónicos y mayores, favoreciendo las discriminaciones.” Desde la entrada en vigor de estas medidas, el precio de las medicinas ha experimentado un incremento del 58%”, manifestó el responsable regional de UGT.

Díez, que comparecía en Rueda de Prensa con su homólogo de Comisiones Obreras, Lorenzo Rubio, alertaba, por otra parte, sobre las nefastas consecuencias de la reforma de pensiones impulsada por el PP y que conllevarán un mayor empobrecimiento de este colectivo. “Desde que está este Gobierno, la pérdida de poder adquisitivo de los pensionistas se cifra en un 4%”, aseguró.

En este sentido, la Unión de Jubilados y Pensionistas de UGT presentaba en su V Congreso Regional, clausurado ayer, una resolución en la que exigía a la Junta de Castilla y León una paga extra de 200 euros dirigida a paliar la situación económica del colectivo de pensionistas que viven por debajo del umbral de la pobreza.

Una realidad que, a juicio de UGT y CCOO, exige una movilización general. Ambos sindicatos aseguran que  nuestro sistema público de pensiones es viable y sostenible y que los servicios sociosanitarios pueden ser soportados desde los presupuestos públicos siempre que haya una fiscalidad eficiente y basada en criterios de equidad y realmente redistributivos.

Por eso, reclaman que se garantice el mantenimiento del poder adquisitivo y mejora de las pensiones a traves de su revalorización anual, la derogación de las reformas y el freno a los recortes llevados a cabo en materia sanitaria, la corrección de las reformas y recortes en Dependencia, y un aumento de la partida para los Servicios Sociales, entre otras actuaciones que eviten un aumento de la protección social, del empobrecimiento, un mayor desempleo con un agravamiento de la crisis y sus consecuencias.

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